MARIANO FERREIRA, ORTODOXO Y MUY VERTICAL
No
es ninguna sorpresa que el Sevilla haya ido al mercado para buscar un lateral
derecho, pese a tener dos en su plantilla. La salida de Diogo estaba
condicionada por la entrada segura de un nuevo jugador que ocupara su posición
en el campo y dentro de la plantilla. De
esta forma fue creciendo el run run dentro de la capital andaluza sobre un posible
fichaje de Mauricio Isla. El nombre del chileno colmaba las expectativas de los
aficionados sevillistas por su perfil mediático y por el rendimiento mostrado
en la reciente Copa América.
Sin
embargo quien ha llegado a Nervión es otro jugador, de nombre Mariano y
apellido Ferreira, y con un perfil diferente al de Isla. El ex bordelés no
tiene ese reconocimiento mediático que el, todavía, turinés si cuenta entre sus
características. Pero más allá del perfil mediático que pueda tener cada uno,
bastante bajo en el caso del brasileño, la importancia de una contratación se
fundamenta en las características competitivas que tenga el jugador y en el
rendimiento que este pueda ofrecer.
Isla
y Mariano son laterales de perfil similar pero juego diferente. Decir que un
lateral es ofensivo, rápido, potente y que ataca mejor que defiende no lo
define como jugador, sólo lo sitúa dentro de un grupo más o menos amplio. Y
Mariano, sí, pertenece a ese grupo de laterales ofensivos, rápidos y potentes y
que destacan mucho más por su producción ofensiva que por su destrucción
defensiva. Pero le separan más cosas de Isla de las que les unen.
Isla
ha jugado muchos años en Italia, en un Calcio donde la intensidad defensiva es
alta y en el cual sobre los laterales recae mucha responsabilidad en cuanto a ofrecer
amplitud y profundidad al juego, junto con un recorrido de ida y vuelta. Además
en sus años de internacional ha convivido junto a Bielsa y Sampaoli,
entrenadores que quieren agresividad e intensidad constante en sus equipos. Por
lo que Mauricio es un lateral intenso, constante y punzante con balón que se
incorpora de manera habitual al ataque.
Mariano
es una lateral de juego diferente, de naturaleza brasileña - y por tanto menos
agresiva - pero al que su paso por Francia le ha europeizado bastante. El ex
del Burdeos es un “2” más ortodoxo, muy de manual, de los que saben interpretar
la posición sin buscar alardes, pero cumpliendo con su cometido de manera muy eficiente
en el ataque.
¿Por
qué comparamos a Isla con Mariano? Para establecer que los futbolistas, por más
que puedan catalogarse dentro de un grupo, no tienen porque tener
características de juego similares.
Dejando de lado la comparativa con el lateral
chileno, que también hemos incluido en este análisis para aquellos aficionados
sevillistas que se preguntaran en que se diferencian ambos, entremos a valorar
cuáles son las características que definen al nuevo fichaje sevillista.
Durante
muchos años cualquier jugador que ha llegado al Sevilla a ocupar la demarcación
del 2 ha tenido una losa muy importante que superar. El rendimiento y
espectacularidad en el juego de Daniel Alves en sus años en Nervión no se olvidan
fácilmente y para la dirección deportiva andaluza ha sido complicado encontrar
un sustituto de garantías. Quizá ha sido la posición que peor ha estado
cubierta a lo largo de los últimos años dentro de la plantilla rojiblanca.
La
dulce anarquía de Alves es extremadamente complicada de volverla a encontrar para
cualquier equipo, porque el de Bahía ha sido- ahora su fútbol se ha
estandarizado algo más- uno de los laterales más atípicos que se recuerdan en
años. El Sevilla ahora ha incorporado a
un lateral de comportamiento muy estructurado, de los que se podrían decir que
se manejan de manera muy convencional dentro de la posición desde el punto de
vista táctico.
Pese
a las diferencias muy evidentes entre el que fue santo y seña en la banda
derecha- y casi cualquier parte del campo- sevillista y el nuevo fichaje
rojiblanco, si comparten un aspecto en su juego. Esta posiblemente sea una de
las características más llamativas de Mariano y que más impresionan a aquel que
no lo conoce demasiado. Al igual que ocurriera con Alves, el ex bordelés tiene
un desplazamiento largo muy preciso a la espalda de la defensa y siempre que
tiene opción de llevarlo a cabo lo pone en liza. En un equipo de jugadores
ofensivos que manejen el desmarque al espacio supone una gran arma, además de
una opción más que evidente para dar salida al juego desde atrás. Estos envíos
los realiza tanto a la zona central –menos- como a la espalda del lateral contrario
para superar la línea de presión y ganar muchos metros. Y su precisión el
desplazamiento es muy alta.
En la
europeización que comentábamos antes, uno de los procesos que ha sufrido
Mariano es el de ir dejando de lado el regate y la conducción. Su fútbol se
basa más en acciones cortas donde el pase profundo vertical toma el protagonismo.
Cuando un compañero le ofrece una línea de pase en profundidad, no duda en
desplazar el balón a la espalda de la defensa rival a cualquier altura en la
que se encuentre el juego. Su fútbol se caracteriza principalmente por
proporcionar profundidad y amplitud desde el pase.
Cuando
encuentra oposición de un rival generalmente no busca el desborde sino la
asociación mediante el pase corto con un compañero o incluso se protege con el
cuerpo para hacer un cambio de orientación con la pierna izquierda. Si bien es un
futbolista diestro marcado, en el pase maneja bien la zurda a cualquier distancia
que realice el envío.
El
juego ofensivo del nuevo lateral sevillista se basa en dos aspectos, amplitud y
verticalidad. Y se fundamenta en los espacios, bien asistiendo a compañeros que
se encuentran en espacios libres o bien atacando los espacios libres él mismo. No
es un lateral de presencia continua en ataque, al menos no lo ha sido en el
Burdeos de Willy Sagnol. Pero cuando llega es mediante incorporaciones a zonas
no vigiladas por el rival. Tiene un gran manejo del tiempo en el que tiene que
incorporarse al ataque y la suficiente velocidad para sorprender con desmarques de ruptura al
espacio.
Cuando
ataca los espacios sin oposición es muy profundo, pero no tiene que serlo para
buscar los centros al área. La escasa utilización del regate para desbordar la
suple con gran calidad en los balones colgados al área. Su zona preferida para
el envío es el punto de penalti y no necesita llegar a línea de fondo para
ponerla bien. También maneja los pases rasos o los centros para la llegada
desde segunda línea de un compañero. Su lectura de la mejor opción para asistir
es muy alta y pocas veces se equivoca a la hora de cumplir con la necesidad que demanda
la situación.
Observamos
que es un lateral bastante ortodoxo ofensivamente hablando y que destaca por el
aprovechamiento de los espacios libres tanto llegando como habilitándolo a los
compañeros y de los que hacen daño por calidad en los desplazamientos, tanto en
los envíos profundos a la espalda como en los centros laterales.
Defensivamente
a Mariano le ocurre algo parecido. Es un lateral que maneja los conceptos
tácticos de manera adecuada, sus basculaciones son correctas, su
posicionamiento en función del juego el natural, domina bien la línea del fuera
de juego en un equipo – el Girondins de Willy Sagnol- que juega con defensa
adelantada y buscando el achique de espacios. Protege la espalda de su pareja central cuando su equipo cierra espacios en la banda contraria y también dentro del
área.
Sin
embargo no es un defensor de los que pudiéramos decir excelsos. Un aspecto que
se le puede achacar es la tardanza en ocasiones para recuperar posiciones
defensivas cuando se ha desplegado ofensivamente. Y el otro también llamativo
en el aspecto negativo es que no es un lateral que recupere muchos balones. Su
defensa es más posicional que agresiva y su modo de actuar más flotante que
presionante, es decir protege más los espacios que el tratar de recuperar la
pelota.
El
problema está en que en ocasiones concede mucho espacio al rival para
controlar, progresar o encararle. Como no entra no suele ser desbordado en
muchas ocasiones por regates rivales, pero si ganándole la espalda al permitir al contrario tiempo para el pase . Su estilo defensivo no es excesivamente
agresivo y prima en él la temporización a la entrada por lo que permite pases
en zonas peligrosas. Como diría un gran amigo mío no es un futbolista de esos
que se pegan al tío y busca el robo por anticipación. Protege más los espacios
que el balón pero en ocasiones no de la manera adecuada.
Esto
se traduce en que le puedan pillar la espalda en situaciones en las que el
equipo está muy adelantado o no tiene suficientes compañeros cerca por
situación de juego.
Desde
un punto de vista sevillista, ¿cómo influye esto? Esa falta de agresividad
defensiva que se observa en Mariano es menos problemática de lo que podría ser
en su anterior club, aunque siempre es aconsejable que el jugador aumente su
intensidad sin balón. En zonas adelantas y actuando en la presión sí se muestra
más solvente. Metido esto en la coctelera defensiva del Sevilla FC debemos
decir que los de Emery generalmente toman menos riesgos defensivos que su
equipo de procedencia, con un repliegue más bajo y un estilo donde se achican
menos los espacios. El concepto defensivo que más predomina en los de Nervión
es de cierre de espacios mediante defensa con más temporizaciones que entradas,
por lo que observan menos traumáticos esos defectos a la hora de cerrar
espacios y de dar opciones al rival a pillarle la espalda.
Aun
así su rendimiento ofensivo es más alto y productivo que su rendimiento
defensivo. De todos es sabido que a Unai Emery le gustan los laterales largos,
que sepan llegar a posiciones ofensivas, que den amplitud al juego y mucha
profundidad. Y en esos aspectos Mariano es un lateral que ofrece todo ello de
forma natural y habitual y que está capacitado para proporcionar muchas
soluciones en ataque a este nuevo Sevilla. No sería nada extraño que sumara un
gran número de asistencias o al menos que generara muchas situaciones de gol,
porque ese es su principal rasgo distintivo. Aunque defensivamente no sea una roca.
De mas calidad y mejor oficio que Douglas Pereira, y mas barato, parece un buen socio para Immobile tanto en pases a la banda como en centros, dices que tendra el Sevilla 3 laterales diestros a ni solo me salen Coke y Ferreira, cual es el otro?
ResponderEliminarGran plantilla esta montando el Sevilla, se acentua cada vez mas la diferencia de los 8 o 10 primeros con el resto. Buen analisis!
Ahh ya era Diogo, no habia leido bien
ResponderEliminarGran análisis Miguel. La verdad es que las comparaciones con Cicinho son poco sostenibles, porque el ya ex sevillista era todo uno contra uno y meterse hacia dentro.
ResponderEliminarSaludos
Es un lateral de desplazamientos y que juega muy abierto. Conducciones no muchas y escaso juego interior .
EliminarGracias por tu valoración ,Pablo .Aunque hay truco .Tú me miras demasiado bien, jejeje